El ABC del crédito – conceptos básicos sobre el crédito

El ABC del crédito – conceptos básicos sobre el crédito

Crédito General

Si quieres manejar tu crédito de la mejor forma, hay algunos conceptos que debes dominar. Usar el crédito correctamente es una puerta para alcanzar tus metas financieras. Revisa a detalle cada uno de los siguientes conceptos básicos que debes conocer:

  • ¿Qué es un crédito? Es dinero prestado que debes devolver con intereses en el tiempo. Cuando te prestan dinero asumes un compromiso de pagarlo después.

 

  • Capacidad de pago: Se refiere a la disponibilidad de recursos netos (ingresos menos gastos) para cubrir regularmente la deuda a contraer. Resta todos tus gastos de tu ingreso neto, para saber el dinero que podrías destinar a las cuotas. Debes tomar en cuenta los gastos fijos y gastos variables.

 

  • Tipos de crédito:
    • Consumo: Crédito a corto o mediano plazo para comprar bienes de consumo.
    • Comercial: Sirve para solventar necesidades económicas de las empresas como aumentar su capital de trabajo o adquirir maquinaria.
    • Hipotecario: Sirve para adquisición de una vivienda o un terreno, para la reparación, remodelación o mejoramiento de vivienda propia y por lo general este tipo de crédito es a largo plazo.
    • Microcrédito: Son pequeños préstamos que se conceden a las personas que requieren consolidar una microempresa.

 

  • Términos que encontrarás en un contrato de crédito:
    • Capital: monto de dinero que recibirás en un préstamo.
    • Prestamista o acreedor: quien presta el dinero, puede ser una institución financiera, cooperativa, mutualista, etc.
    • Prestatario o deudor: quien pide prestado el dinero.
    • Plazo: tiempo en el que debes devolver el dinero.
    • Tasa de interés: costo de que te presten el dinero.
    • Interés de mora: se genera por atrasos en los pagos.
    • Gestión de cobranza: costo para la entidad de recuperar el crédito. La gestión de cobranza cubre los gastos asociados con las llamadas, cartas y visitas que la entidad realiza para recuperar los pagos vencidos del crédito.
    • Tabla de amortización: documento que detalla el monto de cada cuota a pagar durante el plazo de crédito.

 

  • Score de crédito: Es un puntaje que mide el riesgo de que no pagues el crédito. Cuando administras correctamente tus deudas, tu score será alto, mientras que, si tus deudas están fuera de control, tu score será bajo y es posible que no puedas acceder a un crédito.

 

  • Burós de crédito: Están encargados de mantener el registro de la actividad e historial crediticio de las personas, evaluando principalmente el hábito de pago de las obligaciones contraídas. Recopilan la mayor cantidad de información disponible de bancos, cooperativas de ahorro y crédito, casas comerciales, entre otros, con el fin de asignar el puntaje más confiable posible a cada persona. Generan un reporte de crédito con el detalle del historial crediticio del cliente de los últimos tres años, score de crédito, e información adicional relevante para la toma de decisiones en el otorgamiento o no de un préstamo a los solicitantes.
Gana más, gasta menos

Gana más, gasta menos

Finanzas Personales General Planificación y Presupuesto

Autora: Lourdes Hernández

Me gusta mencionar al famoso expositor Mago More: él dice que, si uno NO se plantea un reto, no avanza. Puede tener una o más metas pero que el reto es indispensable para cumplirlas lo mejor y más rápidamente posible.

Digamos que se tiene la meta de aprender otro idioma. El reto es dedicar 30 días seguidos, una hora –mejor la primera hora de la mañana- para practicar ese idioma. Al cabo de los 30 días vas a conseguir una de dos:
1. Aprendiste mucho del idioma y quieres seguir en serio y adelante
2. No le pusiste ni ganas ni aprendiste mayor cosa. Descartas la meta.

El reto que te planteo hoy es de siete pasos para dar un salto importante en el mejoramiento de tus finanzas, y como dice el título: ganar más y gastar menos.

Tarea 1: Anota la meta que quieres cumplir con tu familia. Todos los miembros de la familia se activan cuando comparten un sueño, una meta.
¿Tienes muchos caminos sin un destino?
Tal vez sea muy lindo el viaje, pero no llegaste a ningún lado y gastaste mucho tiempo y dinero.

Tarea 2: El secreto del manejo de las finanzas personales está en identificar a dónde se va el dinero. Escribe en una libreta o en tu celular lo que vas gastando cada día y consolida al final del mes la totalidad.

Tarea 3: Los recursos son limitados por eso hay que priorizar. Todos tenemos límites. Revisemos los gastos básicos que a veces sí se pueden ajustar o eliminar; los gastos variables que siempre se pueden ajustar y que son la llave abierta que no tomamos en cuenta; seamos consumidores responsables; paguemos las deudas a tiempo y guardemos un 10% de nuestros ingresos al ahorro.

Tarea 4: ¿Cómo ajustamos esos gastos?
Con la técnica PERC: Posponer, Eliminar, Reducir y Conservar.
Cada rubro lo analizamos y aplicamos esta técnica. Cuando se adquiere control de las finanzas personales, vuelve la calma y se ven horizontes positivos de orden y crecimiento.

Tarea 5: El dinero que necesitas para cumplir tu meta está en esos gastos que pospusiste, eliminaste y recortaste. Estás empezando a ahorrar y a ganar dinero. Sigue firme en tu propósito.

Tarea 6: Las deudas pueden ser buenas o malas según si tienen un buen fin y si hay un retorno para ti y tu familia. Ten claro y en orden tu presupuesto. No te endeudes más y sigue creciendo.
Recuerda: + esfuerzos – excusas = ÉXITO

Tarea 7:
Hay tres fuentes de ahorro:
1. Cortar gastos no necesarios: TÉCNICA PERC (posponer, eliminar, reducir, conservar)
2. Guardar el 10% de los ingresos. Es tu primer pago. ¡No es negociable!
3. Generar ingresos extras

Importante: sé un consumidor responsable, así tu vida será equilibrada, saludable y de calidad para ti, para tu comunidad y para el planeta.

Descubre lo que esconde cada compra

Descubre lo que esconde cada compra

Ahorro General Planificación y Presupuesto

Autora: Carla Arcos

¿Llegas a fin de mes sin dinero? ¿Tus gastos no te dejan ni para una Coca-Cola?

El consumo responsable es una integración de conceptos muy básicos como lo son, alimentos, servicios básicos, ropa, casa, autos, entre otros, en donde se pretende crear un ahorro significativo en tus consumos, aquí puede ser bien utilizado el clásico lema para la preservación del medio ambiente, el muy conocido reciclar, reducir y reutilizar. ¿Cómo puedes incluir estos tres conceptos en un consumo responsable?, aquí te dejamos unos consejos:

  1. Planifica tus consumos presentes y futuros:

Empieza con pequeñas listas de tus gastos comunes como, por ejemplo, los productos del supermercado, así tendrás un presupuesto aproximado de tu gasto en alimentación.

  1. Ahorrar en servicios básicos:

Comienza por desconectar los aparatos electrónicos que no utilices, así podrás ahorrar en el consumo de luz, también puedes cerrar un poco la llave de paso, de este modo disminuirás el consumo de agua, con estos consejos no solo ayudas a tu consumo responsable, si no también colaboras con el medio ambiente.

  1. Explora tu mejor opción al momento de comprar:

Busca entre varias opciones de un mismo producto, puedes encontrar productos similares y hacer una comparación de precios.

  1. Ahorra en tu consumo de combustible:

Buscar nuevas alternativas de movilización suena a una buena idea, así ayudaras a la disminución de carbono y a tu bolsillo.

  1. Reduce los plásticos de un solo uso:

Compra bolsas de tela, así ahorrarás en arancel destinado a las bolsas plásticas que te dan en el supermercado o en otros establecimientos, también adquiere cosas a granel, de esta forma obtendrás productos al peso reutilizando envases.

Un consumo responsable ayudará no solo en tu economía actual, sino también en tu ahorro a futuro, esperamos te sirvan estos consejos para que inicies un nuevo estilo financiero.

Consejos para ahorrar y conseguir metas familiares

Consejos para ahorrar y conseguir metas familiares

Ahorro General Planificación y Presupuesto

La vida en familia está llena de experiencias y metas compartidas. En un momento estás intentando ayudar a los niños con los deberes y a coordinar sus actividades extracurriculares, y al siguiente estás pensando en metas de largo plazo como la educación universitaria o futuras bodas.

Entonces, ¿cómo puede una familia equilibrar el pago de los gastos diarios con el ahorro de dinero para metas futuras? Todo se reduce a aprender a evaluar el flujo de caja, maximizar los ahorros y planificar tanto el presente como el futuro. Te damos algunos consejos sobre cómo ahorrar dinero para las metas financieras de tu familia.

  • Ajústate a un presupuesto

Analiza detenidamente el dinero que entra y sale cada mes, y quizás encuentres algunos gastos obvios en los que puedes ahorrar. Aunque cada familia es diferente, los gastos suelen dividirse en una de estas tres categorías: gastos fijos, ahorro para metas y gastos discrecionales.

Los gastos fijos, es decir, los elementos esenciales no negociables que mantienen la vida de tu familia, como los pagos de la hipoteca y las cuentas de teléfono, deberían constituir aproximadamente el 50% de tu presupuesto. El ahorro para alcanzar las metas de tu familia y de tus objetivos de jubilación deberían ser alrededor del 10%. Y el gasto discrecional, o lo que queda para gastar a voluntad en “extras” como cenas fuera, no debería ser más del 40% de tu presupuesto.

Si ves que no estás destinando suficiente dinero a la categoría de metas, hay varias formas sencillas de recortar gastos. Si los gastos discrecionales superan más del 40% de tu presupuesto mensual, fíjate en lo que tu familia realmente disfruta y utiliza. Es decir, no te deshagas de Netflix o de tu suscripción al gimnasio si se les da un buen uso, pero quizás haya algunas suscripciones o gastos que tu familia no extrañará si las cancelas.

Si necesitas liberar aún más dinero, mira la categoría de lo esencial: tal vez puedas reducir algunos de tus gastos habituales, por ejemplo, buscando mejores tarifas para el teléfono celular o el seguro de tu vehículo, o encontrando formas de reducir los costos de energía.

  • Automatiza tus ahorros

A menudo, la forma más fácil de ahorrar es automatizar los ahorros para que no permanezcan en la cuenta principal durante demasiado tiempo y corran el riesgo de gastarse antes de poder ahorrarlos.

Puede que ya esté automatizando cierta cantidad para un fondo de emergencia, pero ¿qué hay de un fondo para las vacaciones familiares o ese viaje que quieren hacer el próximo verano? ¿O un fondo para los estudios de posgrado de tu hijo/a? Destinar dinero a una cuenta de ahorro o de inversión de alto rendimiento cada mes, por pequeña que sea la cantidad, puede ayudarte a hacer crecer tus ahorros más rápido de lo que crees gracias al interés compuesto.

Además, no olvides de aumentar tus ahorros a medida que tú o tu cónyuge ganen más dinero. También puedes considerar la posibilidad de destinar una parte de las ganancias inesperadas, como un bono anual o una herencia, a las distintas metas de ahorro de tu familia.

  • Elige el tipo de cuenta de ahorro adecuado para tus metas

Al igual que es probable que utilice una cuenta o producto financiero especializado para ahorrar para la jubilación, ten en cuenta el tipo de cuenta que eliges para una meta concreta. Por ejemplo, si el objetivo es ahorrar para la educación de tus hijos, considera la posibilidad de depositar el dinero en un depósito a largo plazo o un fondo de ahorro diseñado específicamente para ese objetivo.

De igual forma, considera el plazo en el que deseas ahorrar para una meta. Por lo general, si estás ahorrando para una meta en un plazo de cinco años, como un gran viaje en familia o el pago inicial de una casa más grande, probablemente querrás mantener ese dinero en un producto de ahorro de menor riesgo y que te permita contar con la liquidez en el plazo que definiste.  Si el objetivo está a más de cinco años, puedes considerar la posibilidad de ponerlo en una cuenta de inversión para que tenga tiempo de crecer, pero también pueda compensar potencialmente cualquier pérdida que pueda resultar de la volatilidad del mercado. Lo importante es que priorices tus metas, equilibres tus ahorros y gastos y determines los productos que se ajustan a tus necesidades.

Preguntas y recomendaciones para ser un consumidor responsable

Preguntas y recomendaciones para ser un consumidor responsable

Finanzas Personales General Planificación y Presupuesto

El Consumo Responsable se refiere a comprender que los recursos naturales pueden agotarse y que las elecciones que haces al momento de una compra pueden tener un impacto sobre estos recursos. Cuando eres un consumidor responsable, tomas decisiones conscientes de lo que estás adquiriendo. Analizas su precio y su calidad a la vez que por su respeto medioambiental o las condiciones de trabajo en su elaboración.

A continuación, te presentamos diez preguntas que debes hacerte para consumir responsablemente:

  1. ¿Lo necesito?
  2. ¿Puedo compartirlo?
  3. ¿Quién lo ha hecho?
  4. ¿Cómo está hecho?
  5. ¿Por dónde ha llegado?
  6. ¿Puede reciclarse?
  7. ¿Y si lo miro con perspectiva de género?
  8. ¿Cuánto cuesta y cuánto dura?
  9. ¿Qué otras opciones hay?
  10. ¿Pero seguro que lo necesito?

Cuando se habla de consumo responsable, debe tener un enfoque consciente, ecológico, crítico, ético, colaborativo, etc. Todo esto te ayudará a ser un consumidor responsable.

Finalmente, te damos algunas recomendaciones para ser un consumidor responsable:

  • Distingue deseos de necesidades al momento de la compra
  • Adquiere productos naturales, reciclados o reutilizados
  • Analiza la calidad de los productos que compras
  • Busca alternativas que minimicen la explotación de recursos naturales
  • Opta por reutilizar, intercambiar o reparar
  • Haz un buen cuidado o mantenimiento de tus bienes
  • Lee las etiquetas de los productos que quieres adquirir

Con estas acciones podrás ejercer tu poder como consumidor de una forma consciente para el bienestar de nuestra generación y las futuras.

Decisión importante: Comprar un carro

Decisión importante: Comprar un carro

General Planificación y Presupuesto

Autora: Lourdes Hernández

En tu vida vas a decidir muchas e importantes compras. Una de éstas es la compra de un carro. Aunque es un evento emocionante, es también una decisión financiera mayor. Es una decisión que puede tener consecuencias serias.

Para realizar una compra inteligente, necesitas poner tus emociones a un lado. Necesitas también tener información esencial sobre autos y entender los costos de ser dueño de un carro. Fallar en eso puede acarrearte un hiperconsumo y sobreendeudamiento.

Mucha gente cree equivocadamente que el costo de la compra es el único precio que va a pagar por el carro deseado. Olvidan los costos que vienen incluidos en la conducción de un vehículo. Costos de los cuales tú eres el responsable:

  • Mantenimiento
  • Reparaciones
  • Combustible
  • Seguro
  • Matrícula
  • Licencia
  • Multas

Estos costos dependen del valor del carro, del tipo y de cuántos kilómetros recorre. Un carro que recorre el promedio de 12000 kilómetros al año, gasta alrededor de $720 de diésel al año (en Ecuador el galón cuesta $1.43). Con gasolina (Extra $2.18 y Súper $3.18) el costo es mayor, así como el consumo.

Los gastos comunes de usar un carro son:

(Datos al año de un auto que se mueve 12000km/año)

Gastos comunesCosto anual promedio (USD)
Seguro de vehículo1200
Mantenimiento700
Licencia de conducir70
Matrícula, impuestos, revisión, etc400
Llantas (duran 3 años)600
Combustible720
Parqueadero200
Multas (al menos 1)150
TOTAL COSTO4.040

Analicemos el cuadro anterior y respondamos a las preguntas

¿Cuánto cuesta conducir un auto cada año? ¿Tenemos esa cifra? ¿Qué otro costo no está tomado en cuenta este cuadro? ¿Cuánto en promedio necesito cada mes para tener mi carro?

Si has tomado la decisión de comprar un auto, sigue estos pasos:

  1. Investiga antes de comprar: mira precios, marcas, ventajas. Asesórate con un experto
  2. Asegúrate de que tienes el dinero: si vas a sacar un préstamo o vas a financiar el carro, ten todo pre-aprobado para no perder tiempo
  3. Negocia el mejor precio y no te dejes engatusar por los vendedores de autos.
Formas en las que el estrés puede afectar tu desempeño laboral

Formas en las que el estrés puede afectar tu desempeño laboral

Empresa General Negocio

Todos sabemos que el estrés no es bueno para nosotros. Además de afectar tu salud y bienestar general, un exceso de estrés también puede tener un impacto negativo en tu carrera profesional si no lo manejas adecuadamente. Desde interferir en tu desempeño laboral diario hasta impedir que consigas aumentos y ascensos, los efectos del estrés pueden ir más allá de quemarte en tu trabajo.

Te contamos tres formas en que el estrés puede afectarte en el trabajo y algunos consejos para manejarlo de mejor manera.

  1. Puede llevarte a cometer errores

La relación entre los altos niveles de estrés y la dificultad para dormir es bien conocida, pero el insomnio relacionado con el estrés puede ser más perjudicial que simplemente tener pereza la mañana siguiente. “Cuando estás estresado, a tu cerebro le encanta ayudarte a resolver problemas a las 3 de la mañana”, dice la coach ejecutiva Lynn Carnes. “Pero eso no sirve de nada, porque la mejor manera de contrarrestar los efectos del estrés es dormir. Cuando vas con menos horas de sueño de las que necesitas noche tras noche, los efectos te sorprenden”.

Cuando estás demasiado cansado, habilidades básicas como la atención a los detalles pueden disminuir. Gente que no descansa, puede pasar por alto detalles importantes que un cerebro bien descansado captaría, como un punto decimal en el lugar equivocado en un número crítico en un contrato o enviar los documentos equivocados a la trituradora. Errores frecuentes como éstos pueden hacer que no se te tome en cuenta para proyectos clave, que obtengas una puntuación más baja en las evaluaciones de rendimiento o incluso que te quedes sin un posible aumento de sueldo.

Cómo gestionarlo: Si tienes problemas para dormir lo suficiente, Carnes recomienda decirte a ti mismo que volverás a revisar lo que te preocupa al día siguiente, cuando tengas una mejor perspectiva. Esto da a tu cerebro permiso para desconectarse y puede ayudarte a recuperar el sueño, incluso ante el estrés. Los problemas que parecen muy complejos en la oscuridad de la noche suelen tener una solución con ojos frescos por la mañana.

  1. Puede afectar a tu forma de relacionarte con los demás

Las relaciones que tienes con las personas con las que trabajas pueden desempeñar un papel importante en el éxito general de tu carrera. Cuando estás estresado, no sólo eres incapaz de cultivar plenamente esas relaciones, sino que también puedes acabar dañándolas: piensa en contestar bruscamente a un pasante, ser sarcástico con un compañero de trabajo o ser pasivo-agresivo con tu jefe. Si esto ocurre con demasiada frecuencia, tu reputación en la oficina puede verse afectada.

“El estrés y la presión pueden llevarnos a un modo de supervivencia en el que tendemos a ser más autoprotectores”, dice Carnes. Tu estado de ánimo puede crear un encantador día de verano o una tormenta eléctrica.

Cómo gestionarlo: Una pausa de cinco minutos para el autocuidado puede ayudarte a restablecerte. Ya sea saliendo a tomar el aire, llamando a un amigo o incluso mirando las fotos de tus hijos o mascotas en tu teléfono, es probable que sientas un cambio de actitud que puede ayudarte a evitar que digas algo de lo que te arrepientas después.

  1. Puede acabar con tu creatividad

Tener ideas frescas y soluciones a los problemas que te ayuden a destacar es crucial para el progreso de tu carrera. Pero tu capacidad de pensar estratégicamente puede verse afectada cuando tu mente está en otra parte. Quizás las primeras habilidades laborales que se pierden cuando estás estresado, cansado y con poca energía son la creatividad, seguida de la resolución de problemas.

Cómo gestionarlo: Cuando sientas que tu capacidad cerebral empieza a flaquear, se recomienda dar un pequeño paseo para restablecerse. Y si te cuesta producir contribuciones reflexivas, mantenerte hidratado puede mantenerte alerta y concentrado.

Fuente: Northwestern Mutual

¿Cómo decidir si debes aceptar una oferta de trabajo?

¿Cómo decidir si debes aceptar una oferta de trabajo?

Empresa General

Autora: Michelle Guerrero

Aplicaste, te entrevistaron y recibiste la oferta de trabajo. ¡Felicitaciones!

Es emocionante, pero no la aceptes todavía. En este momento, te conviene hacer una pausa y asegurarte de que el nuevo trabajo se alinee con tus objetivos personales y profesionales.

¿No estás seguro por dónde empezar? Esto es lo que los expertos en carreras dicen que debes preguntarte para poder decidir si debes aceptar una oferta de trabajo.

¿Es esto lo que quiero para la próxima fase de mi carrera?

Antes de que puedas determinar si el puesto es adecuado, primero debes entender tu motivación para buscar un nuevo trabajo.

¿Más dinero? ¿Más desafío? ¿Un reto diferente? También es importante considerar si el nuevo entorno se adapta a tu estilo de trabajo. Hazte preguntas como: ¿En qué tipo de entorno prospero? ¿Prefiero trabajar como colaborador individual, parte de un equipo o ambos?

Solicita una descripción detallada del puesto de trabajo que vas a desempeñar y, en caso de tener dudas, habla con el entrevistador y hazle preguntas para tener una idea de lo que implicarán tus funciones.

¿Soy un buen partido para la cultura empresarial?

No entrarías en una relación romántica sin determinar si eres compatible. Lo mismo ocurre con el compromiso con un nuevo empleador.

Idealmente, tu investigación comienza durante la entrevista, con preguntas como: ¿Por qué está abierto el puesto? ¿Reemplazaría a un titular o se trata de una función completamente nueva? ¿Cómo ven a esa persona en 2 años? También puedes conversar con personas que conoces dentro de la empresa o buscar nuevas conexiones en LinkedIn para obtener información sobre la cultura de la empresa.

Si no tienes una imagen clara de la cultura corporativa de tus rondas de entrevistas, aún tienes una oportunidad después de recibir una oferta. No temas hacer preguntas como, ¿Cómo se reconocen y se resuelven los errores? ¿Qué te hace amar venir a trabajar? ¿Puede compartir ejemplos de la declaración de misión de la empresa en acción?

¿El salario y los beneficios se ajustan a lo que estás buscando?

Incluso si una empresa ofrece más de lo que ganas en tu trabajo actual, es posible que lo estén rebajando en función de lo que es un salario típico para los profesionales en su campo.

El mejor momento para negociar es cuando la empresa está ansiosa por incorporarte. La compensación ofrecida inicialmente rara vez es la mejor que pueden hacer.

Por otro lado, es importante ser realista y respaldar tu negociación con datos, no solo con tus propios sentimientos. Las expectativas salariales deben basarse en la tasa de mercado, no en las obligaciones financieras mensuales de una persona.

Más allá del salario, observa de cerca el resto del paquete de compensación. Examina todo, desde los beneficios de salud (incluidos los dentales, de la vista, la licencia por discapacidad y la licencia por paternidad) hasta las vacaciones y tiempo por enfermedad. Si estás interesado en el desarrollo profesional, pregunta si la empresa ofrece financiación para asistir a cursos o capacitaciones; es probable que muchos de estos beneficios sean negociables.

¿Este trabajo se adapta a tu estilo de vida?

¿Cuánto tiempo pasarás viajando? ¿Tienes la opción de trabajar de forma remota? Es posible que un trabajo que requiera mucho tiempo fuera de casa no sea adecuado para un nuevo padre o alguien que simplemente no disfruta de los viajes de trabajo. Pero un trabajo en el que no hay viajes en absoluto podría volverse aburrido rápidamente para un empleado con pasión por los viajes.

¿Estoy tratando de salir de una mala situación?

Puede ser tentador saltar si estás tratando de huir de un lugar de trabajo tóxico. Pero si te mueves demasiado rápido, o ignoras un mal presentimiento que tienes sobre el nuevo trabajo, puedes descubrir que el césped no siempre es más verde.

Incluso si todo se alinea y se ve bien en el papel, no existe una manera segura de saber con certeza que un trabajo será el ajuste perfecto para ti. Todo puede cambiar en cualquier momento: gestión, fusiones y quién sabe qué más.

Siéntate con la oferta de trabajo, presta atención a cómo te sientes sobre el trabajo y la empresa, y tendrás una idea de la decisión correcta.

Fuente: Northwestern Mutual

Maneja tu tarjeta como un piloto profesional

Maneja tu tarjeta como un piloto profesional

General Planificación y Presupuesto

Autora: Lourdes Hernández

Además de tener un buen estado físico, el piloto profesional conoce su carro al milímetro y entrena todos los días.

Tú tienes en tus manos una nave que es la tarjeta de crédito. Tiene la velocidad de la Fórmula Uno, anda las 24 horas del día, los 365 días del año y te da muchas satisfacciones. Pero también te pone en peligro si no sabes manejar.

Las nueve reglas básicas del piloto profesional de la tarjeta de crédito son:

  1. Pagar más del mínimo cada mes, mejor si pagas el total
  2. Diferir de acuerdo a la vida útil del producto que estas comprando. Mientras menos dura, difiere a menor plazo
  3. Llevar un control de todos los diferidos
  4. No prestar la tarjeta a nadie
  5. Tener 1 o 2 tarjetas máximo
  6. Analizar en familia qué se va a comprar antes de salir de casa. La tarjeta no es más dinero
  7. Guardar los recibos y revisar el estado de cuenta cada mes con atención
  8. Pagar a tiempo. Mirar la fecha máxima de pago para evitar interés de mora y gestión de cobranza
  9. Poner un límite mensual a los avances de efectivo

Elige tu carrera y ¡a volar!

El valor emocional y financiero del trabajo

El valor emocional y financiero del trabajo

Empresa General Negocio

Autora: Lourdes Hernández

Una de las actividades en las que más tiempo invertimos es en el trabajo.

De los 18 a los 65 años más o menos, dedicamos ocho horas diarias al trabajo. Se trata de una relación total con nuestra vida.

Dar un significado o un propósito a tu trabajo lo vuelve más intenso y digno de vivir.

Significado del trabajo:

¿Qué más le puedo dar a mi cliente? ¿Qué más puedo ofrecer en mi trabajo? ¿Cómo impulso más a la empresa? A veces los clientes quieren solo vivir una buena experiencia.

Si vendes focos, das iluminación.

Si trabajas en un call center, eres solucionador de problemas, das alegrías.

Encuentra un propósito que te haga trascender a niveles superiores.

Sentimiento y enfoque del trabajo:

¿Cómo me siento desempeñando esta función? ¿Entusiasmado o siento que es una carga? ¿Veo a cada cliente como otra pesadez? ¿Pienso que cada hora será más larga?

¿Hacia dónde va tu atención? Nos sacamos el aire, pero no hacemos nada concreto. Perdemos mucho tiempo en cosas irrelevantes.

Podemos llenar de carga positiva a nuestro trabajo. No verlo como una obligación.

La frase: “El trabajo es tan malo que hasta nos pagan por hacerlo”, tiene una connotación negativa. Debería ser: “Me gusta mucho mi trabajo y además me pagan por hacerlo”.

Recuerda que tú eliges ser contratado. Tú eliges esa empresa.

Nadie te obligó.

De ti depende si lo sufres o lo disfrutas cada día.

Así no sea el trabajo de tus sueños, entrega tu mente y tu corazón al servicio que das. Así sea algo repetitivo, hazlo con actitud abierta y positiva, pues la actitud se percibe.

Busca la forma de tener momentos agradables en tu trabajo; descansos, música agradable, coffee breaks, investigar más.

Perder el trabajo

Las personas que no tiene trabajo están afectadas financiera y emocionalmente.

El despido y el rechazo en la búsqueda del nuevo empleo, hieren los sentimientos.

“Yo caí en depresión cuando perdí mi trabajo” – dice Memo Osuna. Estuve seis meses desempleado.

Lo malo es que relacionamos el trabajo con nuestro valor personal.

Según Memo, él no había salido a vacaciones en 14 años y de pronto se vio con todo el tiempo libre, sin tener en qué ocuparlo.

Esa dedicación exagerada al trabajo fue negativa porque debió hacer uso del derecho a descansar, que no sólo es legal, sino recomendable para la salud.

Quien ha perdido el trabajo lo valora, lo cual es bueno. En adelante, lo va a cuidar.

El trabajo incluye un valor financiero:

  1. Para el colaborador: su sueldo. En tu entrevista es momento de negociar las prestaciones que vas a recibir a cambio de tu trabajo. Recibirás el salario cada quincena, será mensual, hay comisiones, hay bonos. Tienes que averiguar todo.
  2. Para la empresa: utilidades. Cómo tu labor diaria ayuda a que la empresa produzca ganancias. Si no las produce está en peligro de cerrar. Es como si fuera una orquesta en que cada uno tiene una partitura y un instrumento que compone una música bella. No solo es ir y sentarme. ¿Qué haces para generar dinero a la empresa? Si no lo haces, tu propio empleo está en peligro. Debe ser un ganar-ganar. El empresario pone la logística, los medios, para que tú trabajes, ¿qué pones tú?
  3. Para el país: beneficios sociales y económicos. Nuestro trabajo da riqueza al país, con impuestos, con productividad.

Además, puedes ir ascendiendo, aprendiendo más, recibiendo mejor paga, que la empresa crezca, etc.

Imagínate una ciudad donde todo el mundo trabaje con entusiasmo, productividad, pasión, transparencia. Podría disminuir la delincuencia, las adicciones, la pobreza. Es un medio de servir, no solo de llevar a mi casa el sustento.

El trabajo va de la mano con otros valores como: puntualidad, actitud positiva, laboriosidad, creatividad, generosidad, servicio, entrega.

La idea es que llegues a tu casa diciendo: ¡hoy di lo mejor de mí!

Fuente: Paola Álvarez, @mejoratugente