No puedes permitirte no ahorrar

No puedes permitirte no ahorrar

Ahorro General

La campaña publicitaria de Self Bank es divertida y significativa:

Un futbolista famoso cuenta que, de chico, sus papás le decían: de hacer cascaritas no vas a vivir. Bueno, ha vivido del fútbol ganando millones de dólares, ha invertido en escuelas de fútbol, en mansiones, en negocios y sigue creciendo.

“No puedes permitirte no ahorrar” es el slogan de la campaña.

También este personaje puede perder todo su dinero en una vida disoluta, porque gastar es lo más fácil que hay.

Invertir nos da ganancias. En bienes raíces, en negocios, en instituciones financieras. Un banco ofrece intereses sobre el dinero acumulado (inversión), lo cual “pone a trabajar” nuestro dinero y así crece de manera exponencial.

Enseñar a los niños desde pequeños a adquirir el hábito del ahorro, asegura que asimilen esta virtud valiosa y que obtengan sus beneficios.

No se requiere grandes esfuerzos para construir prácticas triunfadoras en nuestros hijos, se trata de un asunto de método, disciplina y rutinas eficientes.

Hablar del manejo del dinero es igual que hablar de otros valores como la amistad, el trabajo en equipo, la generosidad. Si solo se habla de crisis y carencias, y/o se aplican presión e imposición, la enseñanza se disuelve y termina siendo una creencia destructora.

Si queremos que nuestros hijos tengan mayores posibilidades de éxito profesional y buena calidad de vida, respetuosa de la comunidad y el planeta, vivamos en el hogar con estas cinco enseñanzas:

  1. Tener siempre la disciplina de ahorrar la cuota diaria y mensual que hayamos definido. Un ahorro pequeño se convierte en un gran capital con el tiempo.
  2. No gastar el dinero ahorrado en algo que no se haya definido con anticipación.
  3. Aumentar la cuota mensual si es posible, con la certeza de que contar con un fondo sólido nos ayudará a enfrentar momentos difíciles.
  4. Encontrar nuevas formas de ahorro, transformando nuestro estilo de vida hacia menos necesidades y más desarrollo físico, mental y espiritual.
  1. Tener claro que no podemos permitirnos no ahorrar.

Fuente: Marcelo Duque y Valeria Arellano

¿Alcancía o cuenta de ahorros?

¿Alcancía o cuenta de ahorros?

Ahorro General

¿Alcancía o cuenta de ahorros?

¿Microahorro o un fondo de emergencia? Esa es la pregunta cuando se habla de ahorro.

El enfoque que proponemos aquí es un cambio de estilo de vida que aplique los dos mecanismos.

Alcancía: es hacer realidad sueños y metas bajando el consumo de cosas innecesarias y deseos que pueden ser reemplazados por algo de menor costo. Por ejemplo, dejar de comprar café fuera y preparar uno bueno en la casa o la oficina. Ese dinero va al cepo, chanchito o alcancía.

Si un niño empieza desde los 5 años a depositar en su alcancía 1 dólar diario, equivalente a 30 dólares mensuales, a los 25 años tendrá un capital de 80.000 dólares.

Una alcancía puede transformar el futuro de nuestros hijos. La costumbre de ahorrar en una alcancía nunca se pierde. Es un ejercicio periódico, disciplinado, controlado. Es un buen recordatorio del valor del ahorro en pequeñas cantidades.

Es dejar de gastar en cosas que no son parte de nuestro sueño, y por ese sacrificio o ejercicio de disciplina, recibir de premio el cumplimiento de la meta.

Si mi sueño es ir de viaje cada año a un país diferente, hago el presupuesto y ahorro el dinero necesario para cumplir el viaje. Con los ajustes a mis deseos y estilo de vida, puedo conseguir una buena parte del dinero para viajar.

Cuenta de ahorros: es guardar cada mes el 10% o más de mis ingresos, “pagándome” primero a mí mismo antes de ningún otro pago, para ir acumulando un fondo de imprevistos, de emergencias o de jubilación.

Con ahorros podemos lograr grandes proyectos de vida. Si me centro en acumular dinero a mediano o largo plazo, puedo llegar a comprar un auto, iniciar un negocio o tener la entrada para mi casa.

Es recomendable tener una cuenta de ahorro programado aparte de la cuenta normal de pago de gastos. En cuanto recibimos nuestro pago, un porcentaje se transfiere automáticamente a esta cuenta.

El dinero permanece más seguro y tiene difícil acceso. Además, nos da intereses.

Está comprobado que quien ahorra, tiene sus deudas en orden y no teme a los imprevistos.

 

 

En los dos casos, alcancía y cuenta de ahorros, se requiere un cambio de mentalidad, una capacidad de decir “no” a miles de tentaciones diarias. Como todo hábito, al principio cuesta, pero después fluye sin darnos cuenta.

Es ahí cuando se puede decir que hemos cambiado a un mejor estilo de vida.

Fuente: Mónica Duarte, La Hora GT.

 

Ahorro no monetario: pequeñas acciones que generan grandes resultados para tus finanzas

Ahorro no monetario: pequeñas acciones que generan grandes resultados para tus finanzas

Ahorro General

Cuando hablamos de ahorro, tendemos a pensar en términos monetarios, como guardar una parte de nuestros ingresos o reducir gastos innecesarios. Sin embargo, hay formas menos obvias, pero igual de eficaces para mejorar nuestras finanzas. El ahorro no monetario es una de ellas. Ahorrar en el uso de recursos del día a día como luz, agua, comida y tiempo no solo tiene un impacto positivo en nuestro bolsillo, sino también en nuestro bienestar y el medio ambiente.

 

  1. Ahorro de energía: menos consumo, menos gasto

El ahorro energético no solo beneficia al planeta, sino también a tus finanzas personales. Reducir el consumo de electricidad puede parecer algo pequeño, pero si se hace consistentemente, se notará en la factura de luz.

 

Consejos para ahorrar luz incluyen:

  • Invertir en electrodomésticos con certificación de eficiencia energética. Aunque puedan parecer más caros al principio, su bajo consumo de energía te ahorrará dinero a largo plazo.
  • El uso de bombillas LED: Sustituye las bombillas tradicionales por LED, que consumen hasta un 80% menos de energía y duran más.

 

  1. Ahorro de comida: menos desperdicio, más recursos

El desperdicio de comida es un problema común y costoso. La Organización de las Naciones Unidas estima que aproximadamente una quinta parte de los alimentos se tira a la basura (el equivalente a mil millones de comidas). Evitar tirar alimentos es una manera directa de ahorrar.

 

Ideas creativas para ahorrar comida:

  • La planificación de comidas: Organiza tus menús semanales y compra solamente lo necesario. Así evitarás que los alimentos se echen a perder en el refrigerador.
  • Usar las sobras: Las sobras de una comida pueden ser la base de otra. Las verduras sobrantes pueden convertirse en sopas, y el pan viejo puede transformarse en crutones o tostadas.
  • Congelar los alimentos: Congelar comida que no vayas a consumir de inmediato prolonga su vida útil y evita que termine en la basura.

 

  1. Ahorro de recursos: reutilizar y reducir

El reciclaje y la reutilización también son formas de ahorro no monetario. En lugar de comprar productos nuevos, muchas veces podemos reparar o reutilizar cosas que ya tenemos en casa.

 

Maneras creativas de reutilizar y reducir:

  • Reutilización de frascos y envases: Los frascos de vidrio y los envases de plástico pueden tener múltiples vidas, como recipientes para almacenar alimentos o para organizar la despensa. En vez de comprar un nuevo contenedor para la lonchera puedes reusar un frasco o envase que ya tienes.
  • Ropa de segunda mano: Antes de comprar ropa nueva, revisa si puedes intercambiar prendas con amigos o familiares, o incluso buscar ropa en tiendas de segunda mano.
  • Muebles reciclados: A veces, un mueble viejo puede renovarse con una capa de pintura o pequeños arreglos, en lugar de comprar uno nuevo.

 

  1. Ahorro de tiempo: el recurso más valioso

Aunque el tiempo no es monetario, gestionarlo bien puede ahorrarte dinero. Al optimizar tu día a día, puedes evitar gastos imprevistos o innecesarios y podrás usar tu tiempo para cosas más provechosas, positivas para tus finanzas y tu bienestar.

 

Estrategias para ahorrar tiempo:

  • Organización: Tener una buena organización en tu casa o trabajo te permite evitar perder tiempo buscando cosas, lo que puede llevarte a comprar lo que ya tienes.
  • Automatización de tareas: Utiliza herramientas tecnológicas que te permitan automatizar actividades cotidianas, como el pago de facturas, suscripciones y recordatorios importantes. Con esta estrategia, te aseguras de no perder tiempo preocupándote por si pagaste algo a tiempo o revisando cosas que pueden hacerse automáticamente.
  • Eliminar distracciones: Minimiza distracciones digitales y físicas que interfieran con tu flujo de trabajo. Puedes usar herramientas como aplicaciones para bloquear redes sociales o páginas no productivas durante tu horario de trabajo, o simplemente dejar tu teléfono en modo “no molestar” para enfocarte mejor.

Fuentes:

Ahorro no monetario: pequeñas acciones que generan grandes resultados para tus finanzas

Ahorro no monetario: pequeñas acciones que generan grandes resultados para tus finanzas

Ahorro General

Cuando hablamos de ahorro, tendemos a pensar en términos monetarios, como guardar una parte de nuestros ingresos o reducir gastos innecesarios. Sin embargo, hay formas menos obvias, pero igual de eficaces para mejorar nuestras finanzas. El ahorro no monetario es una de ellas. Ahorrar en el uso de recursos del día a día como luz, agua, comida y tiempo no solo tiene un impacto positivo en nuestro bolsillo, sino también en nuestro bienestar y el medio ambiente.

 

  1. Ahorro de energía: menos consumo, menos gasto

El ahorro energético no solo beneficia al planeta, sino también a tus finanzas personales. Reducir el consumo de electricidad puede parecer algo pequeño, pero si se hace consistentemente, se notará en la factura de luz.

 

Consejos para ahorrar luz incluyen:

  • Invertir en electrodomésticos con certificación de eficiencia energética. Aunque puedan parecer más caros al principio, su bajo consumo de energía te ahorrará dinero a largo plazo.
  • El uso de bombillas LED: Sustituye las bombillas tradicionales por LED, que consumen hasta un 80% menos de energía y duran más.

 

  1. Ahorro de comida: menos desperdicio, más recursos

El desperdicio de comida es un problema común y costoso. La Organización de las Naciones Unidas estima que aproximadamente una quinta parte de los alimentos se tira a la basura (el equivalente a mil millones de comidas). Evitar tirar alimentos es una manera directa de ahorrar.

 

Ideas creativas para ahorrar comida:

  • La planificación de comidas: Organiza tus menús semanales y compra solamente lo necesario. Así evitarás que los alimentos se echen a perder en el refrigerador.
  • Usar las sobras: Las sobras de una comida pueden ser la base de otra. Las verduras sobrantes pueden convertirse en sopas, y el pan viejo puede transformarse en crutones o tostadas.
  • Congelar los alimentos: Congelar comida que no vayas a consumir de inmediato prolonga su vida útil y evita que termine en la basura.

 

  1. Ahorro de recursos: reutilizar y reducir

El reciclaje y la reutilización también son formas de ahorro no monetario. En lugar de comprar productos nuevos, muchas veces podemos reparar o reutilizar cosas que ya tenemos en casa.

 

Maneras creativas de reutilizar y reducir:

  • Reutilización de frascos y envases: Los frascos de vidrio y los envases de plástico pueden tener múltiples vidas, como recipientes para almacenar alimentos o para organizar la despensa. En vez de comprar un nuevo contenedor para la lonchera puedes reusar un frasco o envase que ya tienes.
  • Ropa de segunda mano: Antes de comprar ropa nueva, revisa si puedes intercambiar prendas con amigos o familiares, o incluso buscar ropa en tiendas de segunda mano.
  • Muebles reciclados: A veces, un mueble viejo puede renovarse con una capa de pintura o pequeños arreglos, en lugar de comprar uno nuevo.

 

  1. Ahorro de tiempo: el recurso más valioso

Aunque el tiempo no es monetario, gestionarlo bien puede ahorrarte dinero. Al optimizar tu día a día, puedes evitar gastos imprevistos o innecesarios y podrás usar tu tiempo para cosas más provechosas, positivas para tus finanzas y tu bienestar.

 

Estrategias para ahorrar tiempo:

  • Organización: Tener una buena organización en tu casa o trabajo te permite evitar perder tiempo buscando cosas, lo que puede llevarte a comprar lo que ya tienes.
  • Automatización de tareas: Utiliza herramientas tecnológicas que te permitan automatizar actividades cotidianas, como el pago de facturas, suscripciones y recordatorios importantes. Con esta estrategia, te aseguras de no perder tiempo preocupándote por si pagaste algo a tiempo o revisando cosas que pueden hacerse automáticamente.
  • Eliminar distracciones: Minimiza distracciones digitales y físicas que interfieran con tu flujo de trabajo. Puedes usar herramientas como aplicaciones para bloquear redes sociales o páginas no productivas durante tu horario de trabajo, o simplemente dejar tu teléfono en modo “no molestar” para enfocarte mejor.

Fuentes:

En qué invertir tu dinero

En qué invertir tu dinero

Ahorro General

Antes de revisar las opciones de inversión de tu dinero, es importante que conozcas los conceptos relacionados con las inversiones. Es importante no solo que estés familiarizado con ellos, sino que conozcas qué implican, puesto que se está hablando de tu dinero, así que para comenzar a invertir es importante que los revises:

  • El rendimiento. Es el beneficio o las ganancias que esperas obtener, casi siempre se mide en porcentaje de la cantidad que invertiste.
  • El riesgo. Se trata de asignarle un valor numérico a la incertidumbre del desempeño que puede tener tu inversión.
  • El horizonte de inversión. Es el plazo que durará cada inversión o la estrategia en general. Es el tiempo en que deseas conseguir tu meta y por ello el periodo en el que estás dispuesto a mantener tu dinero invertido, puede ser de corto, mediano o largo plazo.
  • Tu perfil de inversionista. Las características y necesidades que te definen como inversor. Conocer tu perfil te ayudará a tomar mejores decisiones y te servirá para saber qué tan agresivo o conservador puedes ser en tus movimientos. Tu perfil incluye considerar objetivos, horizonte, experiencia y tu nivel de resistencia al estrés que generan las inversiones.
  • Grado de liquidez. Se trata de la velocidad con la que puedes retirar tu inversión durante el tiempo que dure.

 

¿En qué invertir?

A pesar de que esta es una decisión personal y depende del análisis que hayas hecho, es importante que conozcas las características de riesgo, rentabilidad o la liquidez que puedes obtener de un momento a otro con algunos de los instrumentos de inversión más comunes.

También tienes que pensar cuánto dinero estás dispuesto a invertir y tus preferencias en cuanto al control se refiere. Si apenas te has decidido a invertir y estás por empezar, hazlo con instrumentos de bajo riesgo, pues ello te permitirá ir aumentando tus conocimientos y empezar a familiarizarte con el mundo de las inversiones.

  • Fondos de inversión. Son inversiones gestionadas por instituciones que reúnen el capital de varios interesados y que se convierten en accionistas de esa sociedad o fondo. Esta alternativa invierte en diferentes instrumentos y, así, reduce riesgos. Se clasifican en tres: deuda, renta variable y de capitales. No tienen rendimientos garantizados y mientras más se arriesgue, mayor será el rendimiento.
  • Son títulos que algunas empresas emiten para financiarse. Los propietarios obtienen derechos, como recibir dividendos en caso de que la emisora los reparta. La inversión consiste en comprarlos y, posteriormente, venderlos a un precio superior o recibir dividendos. Son inversiones de alta liquidez, aunque son de riesgo alto, pues es un mercado volátil. Si quieres invertir en empresas, considera esta opción.
  • Son títulos de deuda de empresas, gobiernos y otras entidades que son emitidos por estas instituciones para financiarse y que dan al propietario el derecho de recibir intereses periódicos, que se fijan desde el inicio y duran toda la vida del bono. Esta inversión se hace para obtener una ganancia con el pago de los intereses y ofrece buenos rendimientos, pero menores que las acciones. Es común que se incluyan en los fondos de inversión como un instrumento más seguro con la idea de diversificar el fondo, pues un bono está considerado de bajo riesgo. Si estás decidido a empezar, esta es una de las mejores opciones para invertir.
  • Bienes raíces. Esta inversión consiste en comprar un inmueble para, posteriormente, venderlo a un precio superior o alquilarlo. Puedes comprar terrenos, casas o departamentos, y cuando veas que una zona está ganando plusvalía, luego venderlos en un precio mucho mayor por el incremento de la demanda. De igual forma, comprar departamentos para alquilarlos es una excelente opción para que obtengas ingresos pasivos.
  • Invertir en negocios. Consiste en aportar los fondos que se requieren en un negocio con la finalidad de obtener beneficios con la utilidad o luego vender tu porcentaje de participación. Puedes invertir en un negocio propio o en el de alguien más, en uno nuevo o en una empresa que ya esté establecida.
  • Compra y venta de divisas. El mercado de divisas, conocido como Forex, es una alternativa de inversión que a diferencia de otras opciones, puede variar en el riesgo involucrado. Las monedas se aprecian o pierden valor debido a los cambios que se producen en los mercados y las variaciones se convierten en la oportunidad de obtener rendimientos. Esta es una inversión que ofrece una alternativa eficiente, pues el precio por unidad puede ser más atractivo que en otras opciones. Sin embargo, este vehículo no es para todo tipo de perfil, pues los riesgos dependen del inversor y de un momento a otro se puede perder o ganar mucho dinero, a diferencia de otros instrumentos más estables.
  • Si bien existen muchos mitos asociados a esta opción, de la misma manera que con las divisas, la compra de criptomonedas se hace a través de servicios digitales que son seguros, ya que cada vez que se hace un movimiento en la cuenta de alguno de los tenedores de una criptomoneda, queda un registro que es inalterable. La inversión se hace con la compra de unidades de la criptomoneda por cierta cantidad de dinero, para después venderlas a un precio superior cuando la demanda por cada unidad haga que el precio suba.

Antes de hacer alguna inversión, es de vital importancia que realices un buen análisis de cada una de las opciones que tienes disponibles y después decidas en dónde quieres colocar tu dinero. No te olvides de respetar tu perfil, tu horizonte y tu meta de inversión y por supuesto, nunca arriesgues más de lo que tienes disponible.

 

Fuente: https://www.bbva.mx/educacion-financiera/ahorro/en-que-invertir.html

Consideraciones para invertir tu dinero

Consideraciones para invertir tu dinero

Ahorro General

Cuando se habla de salud financiera, los expertos no solo se refieren al ahorro, pues pese a todo el esfuerzo que supone guardar dinero, el no producir una ganancia, tiene un enemigo conocido como “inflación”, que es el aumento generalizado de los precios.

El problema es que el ahorro se mantiene sin crecer, mientras que la inflación encarece el precio de los productos y los servicios, por lo que en un tiempo el dinero que hayas guardado se irá quedando rezagado.  Por eso, cuando tengas un buen dinero ahorrado, busca las mejores opciones para invertir, pero también las que te parezcan más seguras, pues la mejor forma de combatir el aumento de los precios es con inversiones, que ponen a trabajar y pueden hacer crecer tu dinero, algo fundamental para alcanzar tus metas financieras.

 

¿Qué es una inversión?

Es la actividad en la que usas tus ahorros en algún instrumento o proyecto con la meta de obtener un beneficio o rendimiento en el futuro. Sin embargo, las inversiones suponen un costo de oportunidad, puesto que los recursos que inviertas no los tendrás disponibles en el presente para ocuparlos en otra cosa al mismo tiempo.

Si lo piensas, no dedicarías recursos de los que puedes sacar ganancias en actividades que no sean rentables, por lo que para maximizar los resultados deberás usar el dinero para aquello que te entregue beneficios. Además, en todas las operaciones debes considerar un componente de riesgo, pues una inversión podría no resultar como esperas, por lo que debes estar preparado para diversos factores.

Para medir los posibles resultados que te pueden otorgar las inversiones, compensar el costo de oportunidad y hacerse más atractivas, los instrumentos prometen cierta cantidad de intereses, que son la expresión en porcentaje de la posible ganancia que te puede dejar una inversión.

Las inversiones deben ser comparadas con tres factores en mente: el riesgo, el rendimiento y el plazo que duran. Idealmente una inversión debe tener muy bajo riesgo, un gran rendimiento y durar un tiempo razonable, pero lo cierto es que es complicado encontrar inversiones ideales y, por ello, debes aprender a invertir.

 

¿Cómo hacer una inversión?

Las inversiones son actos racionales, es decir, implican varios procesos en los que tienes que hacer un análisis y posteriormente tomar una decisión. Debes buscar obtener el máximo rendimiento, el riesgo más bajo y el menor tiempo posible para conseguir ganancias. Si bien la inversión perfecta no existe, lo ideal es que busques un buen balance entre esas tres variables. Por ello necesitas:

  • Estudiar tus opciones. Al conocer la meta de obtener más rendimiento, menos riesgo y un horizonte acotado de tiempo, deberás estudiar las alternativas que tienes para alcanzarla y luego elegir la opción más adecuada para tus necesidades.
  • Decidir cuánto dinero vas a invertir. Es fundamental que sepas cuánto dinero destinarás a tus inversiones, pues debes tener el control de tu presupuesto en todo momento.
  • Fijar cuánto dinero quieres ganar. Aunque con las inversiones no existe límite de ganancias, lo ideal es que vayas paso a paso con los montos de dinero que deseas obtener. Conocer esa cantidad te ayudará a tomar decisiones durante el proceso, pues puede suceder que un instrumento genere más dinero, pero se salga del tiempo establecido, o que sea más riesgoso de lo que estás dispuesto a aceptar.
  • Delinear una estrategia. Ahora que ya sabes cuánto quieres, deberás trazar un plan. Calcula el plazo, rendimiento e investiga posibles instrumentos de inversión.

Sin embargo, es importante que te tomes el tiempo para evaluar todas tus opciones y consideres que las inversiones deben estar diversificadas, es decir, repartidas en diferentes instrumentos para proteger tu dinero ante eventuales pérdidas y obtener un mejor rendimiento.

 

¿Y cuánto dinero debes invertir?

Como te podrás dar cuenta, siempre existe un cierto nivel de riesgo, por lo que solo deberías invertir si tienes dinero ahorrado o si te puedes permitir perder un poco de efectivo de tus ingresos sin que tu salud financiera se vea afectada, porque la idea es que en cualquier escenario puedas mantener tu nivel de vida y seguir cubriendo tus necesidades, por lo que el consejo es que nunca arriesgues más de lo que tienes apartado para invertir.

Cuando se habla de inversiones, seguro has escuchado la siguiente frase: “nunca poner todos los huevos en una misma canasta”, a lo que se refiere es que no es recomendable que invertir todo tu dinero en un solo instrumento. Por ello, los mejores inversionistas diversifican.

Para tener una inversión distribuida, es necesario que selecciones varios instrumentos con los que te sientas a gusto y decidir la cantidad de dinero que vas a colocar en cada uno de ellos. Lo ideal, es hacerlo a través de un plan en el que consideres el plazo, el riesgo, los rendimientos, tu nivel de tolerancia a la incertidumbre y el tiempo que dura la inversión.

Cuando hayas analizado con cuidado todos los factores anteriores, tendrás tu estrategia de inversión. Lo recomendable es hacer un plan por cada una de las metas financieras que tengas y que pretendas lograr con tus movimientos.

 

Consejos si es la primera vez que vas a invertir

  • Haz un plan y fija tus metas de rentabilidad. Al hacer esto podrás tomar decisiones de acuerdo con tu perfil y objetivos, por lo que si ves riesgo puedes protegerte o, en cierto caso, arriesgar más para incrementar tus ganancias.
  • Determina el punto de partida. Elige instrumentos con los que te sientas seguro, recuerda que luego podrás cambiarlos por otros cuando quieras arriesgarte o volver a ellos en caso de que requieras refugio.
  • Mantente al tanto de las comisiones. Dependiendo del tipo de inversión que elijas habrá instituciones intermediarias, por lo que podrían existir comisiones por las ganancias, por lo que debes considerar ese porcentaje.
  • Revisa periódicamente. Cada cierto tiempo monitorea el avance de tus inversiones. Si no han dado resultados, evalúa cambiar de herramienta para reenfocar el camino.
  • Invierte seguro. Solo coloca tu dinero con instituciones que estén debidamente supervisadas, reguladas y autorizadas.
  • Incrementa tu cultura financiera. Uno de los mejores consejos es no hacer movimientos en los instrumentos que no conoces o no sabes cómo funcionan. Entre más conozcas de herramientas de inversión, tendrás más capacidad para sacarle mejores rendimientos a tu dinero. Además, es importante que sepas de qué hablan cuando te ofrecen hacer transacciones o colocar recursos en un nuevo instrumento. Conocer te permitirá tomar las mejores decisiones sobre qué hacer con tu dinero.

 

Fuente: https://www.bbva.mx/educacion-financiera/ahorro/en-que-invertir.html

Mecanismos de las instituciones financieras para invertir

Mecanismos de las instituciones financieras para invertir

Ahorro General

Autora: Lourdes Hernández

Cuentas de ahorro:

Se aperturan con un monto mínimo de 10 dólares, con copia de la cédula de identidad y copia de un servicio básico.

Cuentas de ahorro programado:

Requieren los mismos requisitos. La diferencia es que el usuario registra una fecha en la que podrá sacar el dinero. ¿Qué sucede si necesita su dinero antes de la fecha? Nada, solo debe seguir un procedimiento sencillo para liberar sus fondos. El objetivo de este producto es impulsar el ahorro. Además incluye pago de intereses.

Cuentas de ahorro con descuento inmediato:

Requieren los mismos requisitos. Además de registrar el día en que se podrá retirar el dinero de la cuenta de ahorros, se instruye a la Institución para que se extraiga de otra cuenta un monto acordado cada mes y se lo guarde en la nueva cuenta. Este mecanismo es ideal para personas que no han logrado ahorrar de otras maneras. Incluye pago de intereses.

Certificados de inversión o depósito:

Con un mínimo de $500 se abre un certificado de depósito y se acuerda un porcentaje de interés y un plazo. Transcurrido dicho tiempo, la institución financiera devuelve el dinero junto con los intereses pactados. También se puede solicitar que los dividendos o intereses se paguen periódicamente.

Si se saca el dinero con anticipación, se debe pagar una penalización.

Este producto brinda más interés que los depósitos a la vista, o sea las cuentas antes mencionadas.

Formas de Invertir para Jóvenes: Cómo Ahorrar para lo que Viene

Formas de Invertir para Jóvenes: Cómo Ahorrar para lo que Viene

Ahorro General

Autora: Ana María Velasco

Invertir desde joven no tiene que ser complicado. Puedes comenzar a construir tu futuro financiero con pequeños cambios en tu rutina diaria y decisiones inteligentes. Por eso aquí te presento maneras de invertir y ahorrar para estos grandes y emocionantes logros.

 

  1. Fondo de Emergencia

Antes de pensar en grandes inversiones, es crucial tener un fondo de emergencia. Este fondo te ayudará a enfrentar gastos inesperados sin tener que endeudarte o vender inversiones.

Por ejemplo, imagina que tu celular se rompe de repente o que tu auto necesita una reparación urgente. Tener ahorros para estos imprevistos te evitará endeudarte o usar el dinero destinado para otras metas.

 

  1. Ahorro Automático: Facilita el Proceso

Configura transferencias automáticas desde tu cuenta a una cuenta de ahorros. Al automatizar el ahorro, te aseguras de que parte de tu ingreso se destine directamente a tus metas, sin que tengas que pensarlo. Si tienes varias metas de ahorro, puedes asignar un porcentaje específico para cada una: una parte para la casa, otra para el auto, y otra para bienes raíces. Así ahorras para cada una de estas automáticamente.

 

  1. Inversiones en Cuentas de Ahorro de Alto Rendimiento

Este tipo de cuentas te permite ganar más intereses sobre tu dinero en comparación con las cuentas tradicionales. Aunque no es una inversión propiamente dicha, es una forma segura de hacer crecer tu dinero mientras ahorras para tus metas.

Imagínate que recibes un regalo en efectivo por tu cumpleaños. En lugar de gastarlo todo, deposítalo en una cuenta de ahorro de alto rendimiento. Este tipo de cuentas te permiten ganar intereses, lo que significa que tu dinero trabaja para ti. Es una forma sencilla de hacer crecer tu dinero mientras decides cómo invertirlo en objetivos más grandes.

 

  1. Fondos de Inversión: Crecimiento a Largo Plazo

Si tu horizonte de tiempo es a largo plazo, como para comprar una casa o invertir en bienes raíces, los fondos de inversión son una excelente opción. Estos fondos diversifican tu inversión en diferentes acciones y bonos, reduciendo el riesgo y ofreciendo un potencial de crecimiento considerable.

 

  1. Compras inteligentes

Prepararte para el futuro comienza con las decisiones que tomas hoy. Ser consciente de tus compras es clave para asegurar que cada gasto te acerque a tus objetivos, en lugar de alejarlos. Comprar artículos que realmente necesitas y optar por productos de calidad significa que estarás gastando menos a largo plazo, evitando reemplazos constantes y gastos innecesarios. Esta mentalidad no solo te permite ahorrar más, sino que también te enseña a valorar tus recursos y a tomar decisiones financieras más estratégicas.

 

Invertir para el futuro es más fácil de lo que parece. Con pequeños cambios en tu día a día, como ahorrar automáticamente, o hacer compras inteligentes, puedes empezar a construir un camino sólido hacia metas importantes como una casa, un auto, o bienes raíces. ¡No esperes más, invierte en tu futuro financiero hoy!

 

 

 

 

Papá y mamá: enseñen a manejar el dinero a sus hijos

Papá y mamá: enseñen a manejar el dinero a sus hijos

Ahorro General

Autora: Lourdes Hernández

De niño nadie me enseñó a manejar el dinero, declara la mayoría de los participantes de los talleres de educación financiera.

Yo me incluyo en esa afirmación pues no me enseñaron el manejo de dinero en casa. 

Nací en una familia de diez hijos, donde lo mejor era una actitud militar. Y estuvo bien para forjar el carácter. 

Lo que faltó fue darnos conocimientos básicos sobre qué es el dinero, para qué sirve, cómo se lo obtiene. Y después, darnos la responsabilidad de administrar cada centavo. 

Le debo a mi madre cuidar el dinero, dice Jazmín González, una estudiante. Mamá me decía que hay que guardar para imprevistos. 

Entregar a los hijos, desde niños, una cantidad de dinero mensual, enseñarles a ahorrar una parte, no ceder ante sus caprichos, convertir a los hijos en aprendices del oficio de los papás, permitir que vendan limonada o galletas a los vecinos, son pasos cruciales para la vida.

De forma espontánea, algunas de mis hermanas fueron ahorrativas, planificaban su vida con base en metas y hasta nos prestaban dinero a los menores. 

Igual fue con la cocina: algunos, naturalmente, entraban a la cocina, aprendían y practicaban recetas y creaban sus propios potajes. 

¿Qué es el dinero? Según Valeria Arellano, el dinero debe ser considerado como un valor más. Si en la casa se habla de dinero cuando hay problemas, se desarrolla inseguridad en los niños. Si se habla naturalmente de éste, sin mayor aspaviento, los chicos aprenden a cuidarlo, sin provocar ansiedad ni avaricia.

¿Para qué sirve el dinero? Es un medio para conseguir productos y servicios, por lo tanto, se lo cuida al igual que nuestras pertenencias, alimentos y recursos naturales.

¿Cómo se lo obtiene? Con trabajo, en primer lugar, y con ahorros para hacerlo crecer.

Frases como: no topar lo ajeno, vivir con lo que uno gana, ahorrar para darse gustos… son aprendizajes de la niñez que los padres tenemos que inculcar. Hablar de las vacas flacas y de las cosas que no cuestan como caminar por la naturaleza.

La avaricia -dice el Papa Francisco- es un pecado que no es de la billetera sino del corazón, del que uno puede curarse reflexionando sobre la muerte ya que los bienes terrenales no caben en el ataúd. 

Por otro lado, el despilfarro de cosas, el malgastar el dinero nos hace perder oportunidades de negocios, de cumplir metas y pagar deudas. Nos vuelve hiperconsumistas y dispersos. 

En una frase -que los niños deben conocer-, cuidar el dinero nos hace dormir tranquilos y vivir en paz.