Mujeres crean un proyecto comunitario sostenible

Mujeres crean un proyecto comunitario sostenible

Autora: Lourdes Hernández

Cuando a Julie Milne, fundadora de The ReMakery, le preguntaron si su proyecto tiene un enfoque de diversidad, ella respondió así:

“No importa quien participa y a quién se beneficia. Hay familias enteras que viven en un garaje y nosotros no les preguntamos por qué viven así y qué piensan hacer. Solo les invitamos a comer una comida caliente de productos orgánicos y locales”.

Según ella, The Remakery es crear gozo y magia.

¿Cómo comenzó su trabajo comunitario?

Julie tuvo un diagnóstico temprano de cáncer, y mientras estaba en su tratamiento, la directora de una escuela le invitó a sembrar una huerta allí, con los alumnos.

Le dijo: “no te puedes morir hasta que no termines la huerta”.

Fue el principio de varias huertas por toda la localidad, en los patios traseros de las casas, en espacios cedidos por la municipalidad, y finalmente, en una prisión cercana.

En la actualidad, la producción es tan grande que no solo abastece a las familias y prisioneros, sino que sirve para entregar a personas de escasos recursos. Para complementar el proyecto, Julie y su equipo de mujeres han contratado un chef (el hijo de Julie) para cocinar almuerzos que se entregan a diario a familias con niños y jóvenes que no tiene buena alimentación debido a la situación económica de sus padres.

Para quienes quieren formar una comunidad de ayuda humanitaria en su barrio, Julie resume los siguientes pasos:

  1. Sembrar una huerta en el patio trasero de tu casa.
  2. Continuar con varias huertas en terrenos de la localidad, sean jardines privados o espacios públicos.
  3. Apoyarse con especialistas en permacultura para tener una buena producción.
  4. Pedir recursos a la municipalidad o a una ONG interesada en formar parte del proyecto.
  5. Encontrar la población beneficiaria cerca del barrio e involucrarla en el trabajo de las huertas.
  6. Repartir la cosecha para las familias productoras, y entregar el resto a los beneficiarios.
  7. Tener un lugar para reuniones en el que se ofrezca café y agua aromática sin costo (¡esta es la principal recomendación de The Makery!)
  8. Encontrar oportunidades para crecer: tener una cocina para preparar alimentos para la población beneficiaria. Un ropero para reparar y/o donar vestuario. Una mecánica de reparación de bicicletas. Un espacio para cuidar niños vulnerables en las tardes. Otros.
  9. Mantener el proyecto en el largo plazo con apoyo de los hijos y nietos.

Fuente: documental Together we grow (Juntos crecemos) de Happen Films

Emprendimiento General

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