Cómo pasar de poco dinero a mucho dinero
Autora: Lourdes Hernández
Comencemos con un examen. Contesta sí o no:
- Trato de ganar más
- Trato de pagar deudas
- Trato de ahorrar
- Soy responsable de mis finanzas
- Trato de cobrar por mis servicios o productos
- Hago caso de consejos
- Hago caso a mi corazón y a mi mente
- Tomo decisiones
¿Cuál es la conexión entre las primeras 4 preguntas y las otras 4? Que el manejo de dinero es mental. Si no cobras por tus productos, si crees que tus servicios son de poco valor, envías un mensaje a tu mente de que no quieres tener más dinero, de que la abundancia no va contigo.
Para aprender a mejorar la relación con el dinero, hay que asumir el desafío de la prosperidad. ¿Cómo?
- Sentir que tu trabajo es útil.
- Encontrar patrones de comportamiento: gasto todos mis ingresos sin registrar en qué los usé. Si tengo dinero en la mano, quiero gastarlo. Si tengo algo ahorrado, me siento seguro o incómodo por no gastarlo.
- No poner el dinero encima de todo y en cada conversación: “No puedo darme ese lujo”. “No es para mí”. “Solo los ricos… bla bla”. Son mensajes negativos que tu mente los toma como reales. Aquí hay otros: “cuánto dinero haces cuán grande eres”. “Mientras más dinero haces más exitoso eres”. Cambia estas expresiones por: Mientras mejor persona, más exitoso-a soy.
- Reconocer que éste es un aprendizaje para siempre: se puede aprender, se puede tropezar, encontrar nuevas oportunidades, según vas pasando los ciclos de vida. Necesitarás dinero y/o crédito toda la vida.
- Entender que sí tenemos control sobre el dinero: y no al revés. En nuestro país no hemos vivido una guerra o una gran depresión; es casi imposible morir de hambre porque hay alimentos en abundancia. En cambio, quienes han vivido experiencias de guerras o que viven en zonas desérticas, o durante el invierno, aprenden a ahorrar a la fuerza.
- No hay que reverenciar al dinero: este es un tema a conversarlo con los hijos con la pareja, en familia.
- Tomar decisiones frente al dinero: ¿Qué gran proyecto vamos a cumplir con nuestro dinero, aquel que ganamos cada día desde hace años? ¿Construir una casa? ¿Estudiar? ¿Tener una jubilación segura?
Fuente: Leisa Peterson
Uncategorized