Utilizar la imaginación para invertir en grande

Utilizar la imaginación para invertir en grande

Ahorro General

En el mundo de las finanzas, la imaginación no es solo una herramienta creativa, sino una estrategia poderosa. Mientras muchos se enfocan en competir dentro de los márgenes tradicionales del mercado, los verdaderos visionarios se atreven a crear nuevas rutas hacia la riqueza. Como bien dice la frase: “Crear es para visionarios, competir para normales”, y en el ámbito de la inversión, esta distinción puede marcar la diferencia entre el éxito extraordinario y el rendimiento promedio.

¿Qué significa invertir con imaginación?

Invertir con imaginación implica ver oportunidades donde otros ven riesgos, y apostar por ideas que aún no han sido validadas por el mercado tradicional. Es pensar en grande, más allá de los instrumentos financieros convencionales, y visualizar cómo una inversión puede transformarse en un fondo millonario.

Por ejemplo, los fondos de inversión permiten reunir capital de múltiples personas para invertir en activos diversos, reduciendo el riesgo y aumentando el potencial de rentabilidad. Esta estrategia, aunque común, puede ser potenciada con creatividad.

De ahorrador a inversionista visionario

Según TusFinanzas.ec, la inversión es el uso de tus ahorros en instrumentos o proyectos con el objetivo de obtener beneficios futuros. Pero para que esa inversión sea realmente transformadora, debe ir acompañada de análisis, estrategia y, sobre todo, visión.

Un inversionista visionario:

  • Diversifica sus inversiones para reducir riesgos.
  • Conoce su perfil de riesgo y adapta sus decisiones a sus objetivos personales.
  • Aprovecha instrumentos como fondos mutuos, acciones, bonos o bienes raíces, pero con un enfoque innovador.

Fondos millonarios: ¿utopía o posibilidad?

Invertir en un fondo millonario no significa necesariamente tener millones para empezar. De hecho, la bolsa de valores permite invertir sin un monto mínimo, lo que democratiza el acceso a grandes oportunidades. Lo importante es la estrategia y la visión a largo plazo.

Los fondos millonarios pueden surgir de:

  • Inversiones inmobiliarias inteligentes, como propiedades en zonas de alto crecimiento.
  • Participación en fondos de inversión diversificados, que buscan superar el rendimiento promedio del mercado.
  • Crowdfunding inmobiliario o empresarial, donde se une capital con otros inversionistas para proyectos de alto impacto.

La imaginación no es solo para artistas o soñadores. En el mundo financiero, es la chispa que enciende las grandes ideas de inversión. Mientras muchos compiten por rendimientos seguros, los visionarios crean nuevas formas de generar riqueza. Invertir en grande no es cuestión de suerte, sino de visión, estrategia y creatividad.

Así que la próxima vez que pienses en tu futuro financiero, recuerda: crear es para visionarios, competir para normales. ¿En cuál grupo quieres estar?

 

Guía para crear tu propio reto de ahorro

Guía para crear tu propio reto de ahorro

Ahorro General

Autora: Ana María Velasco

Se acerca el fin del año, y con él no solo llegan las festividades y vacaciones, sino también el cierre de este ciclo 2025.

Los últimos meses del año suelen ser los más caóticos: fiestas, reuniones, compras, viajes… todo se acumula. Y aunque son momentos para disfrutar, también pueden traer un estrés financiero que no solo nos afecta hoy, sino que también nos puede complicar el inicio del nuevo año.

A veces:

  • Nos endeudamos por salir de vacaciones en Año Nuevo.
  • Gastamos todos nuestros ahorros en regalos navideños.
  • Aumentamos nuestros consumos en comidas, salidas y celebraciones.

Por eso, te propongo comenzar un reto de ahorro, un pequeño desafío para los meses que quedan. Así podrás disfrutar sin culpa y empezar el próximo año con el pie derecho.

 

¿Qué es un reto de ahorro?

Es un desafío personal que nos impulsa a guardar dinero de forma constante y consciente, durante un tiempo determinado, para cumplir una meta financiera.

En este caso, el reto estará enfocado en el periodo que queda hasta finalizar el año.

 

¿Cómo crear tu propio reto de ahorro?

1.Analiza tus finanzas actuales

  • Ten claro cuánto ganas y, sobre todo, en qué gastas tu dinero.
  • Observa tus hábitos de consumo: ¿en qué se te va más el dinero?
    • Sé específico: si, por ejemplo, todas las semanas comes fuera de casa, anota cuánto gastas, en donde y la fecha
  • Esta información te ayudará a entender cómo manejas tus finanzas y dónde puedes comenzar a ahorrar.

2.  Define una meta clara

  • Cada persona tiene necesidades distintas, así que tu meta debe adaptarse a ti.
  • Para plantear, usa el método SMART, es decir que tu meta debe ser:
    • ESpecífica, Medible, Accionable, Relevante, Temporal (tiene una fecha límite).

3. Diseña tu plan de acción

  • Cuando ya tengas claro qué es lo que quieres lograr piensa en cómo lo vas a hacer. Lo importante de esto es que no tiene que ser difícil, tienes que elegir una meta que se sienta fácil, que no cambie drásticamente el rumbo de tu vida, porque entre más difícil sea, es menos probable que la cumplas.

Ejemplo:

Julia se dio cuenta de que uno de sus mayores gastos es el transporte. Por eso, se propuso reducir de $10 a $5 semanales en este rubro. Su plan hasta el fin de año es que en lugar de tomar taxi todos los días a la universidad, decidió hacerlo solo los lunes, miércoles y viernes. Los otros días la llevará una amiga o usará el autobús.

  • Esta meta es alcanzable y sostenible, ya que no cambia drásticamente su rutina, pero sí representa un ahorro real.

 

  1. Mira hacia el futuro: el reto como un premio

Completar este reto no sólo significa haber ahorrado dinero, sino también haber demostrado constancia, disciplina y compromiso contigo mismo.

Cuando finalice el año y veas el resultado, date un pequeño premio: no necesariamente gastar el ahorro, sino reconocer el logro. Puedes darte un gusto simbólico o usar una parte de lo ahorrado para invertir, crear un fondo de emergencia o planificar tus metas para el 2026.

El verdadero valor del reto no está solo en el dinero acumulado, sino en la mentalidad que construyes: una que te motiva a seguir creciendo, mejorando y tomando decisiones financieras más inteligentes.

Ejemplos de retos de ahorro que te puedes proponer este fin de año:

 

  1. El reto de las compras navideñas-

En diciembre, los regalos, decoraciones y cenas familiares suelen desbordar el presupuesto.

  • Reto: Reducir un 20% del gasto total navideño en comparación con el año pasado.
  • Cómo hacerlo:
    • Establece un presupuesto fijo para regalos y haz una lista antes de comprar.
    • Busca alternativas más significativas que costosas: regalos hechos a mano, intercambios familiares, o experiencias compartidas.
    • Aprovecha ofertas con cabeza: si algo no estaba en tu lista, probablemente no lo necesitas.
  1. El reto del viaje de fin de año

Muchas personas viajan durante las fiestas y terminan gastando más de lo planeado en transporte, hospedaje o comida.

  • Reto: Ahorrar $10 o $15 semanales desde ahora hasta fin de año para cubrir gastos del viaje.
  • Cómo hacerlo:
    • Guarda ese monto en una cuenta separada o en una alcancía digital.
    • Reduce pequeños gastos diarios (cafés, delivery, snacks) y transfiere ese dinero a tu fondo de viaje.
    • Planea con anticipación: comprar boletos o reservar hospedaje con tiempo puede significar grandes ahorros.
  1. El reto del “enero sin deudas

Enero suele ser un mes difícil porque gastamos de más en diciembre y empezamos el año ajustados.

  • Reto: Llegar al 1 de enero con al menos un fondo de emergencia equivalente al 10% de tu ingreso mensual.
  • Cómo hacerlo:
    • Aparta cada semana una pequeña cantidad fija, aunque sea mínima.
    • Evita gastos innecesarios durante los últimos fines de semana del año.
    • Si recibes aguinaldo o bono, reserva una parte (aunque sea el 15–20%) exclusivamente para ese fondo.

Aprovecha estos últimos meses del año para retarte, aprender y prepararte. Verás que empezarás el 2026 con más tranquilidad, más control y, por supuesto, más dinero en tu bolsillo.

¿Por qué ahorrar no es imposible?

¿Por qué ahorrar no es imposible?

Ahorro General

Autora: Ana María Velasco

Ahorrar no es imposible: es cuestión de enfoque

La principal razón por la que muchos creen que no pueden ahorrar es porque asocian el ahorro con “dejar de disfrutar”. Sin embargo, quienes lo logran entienden que ahorrar no significa privarse, sino organizarse para vivir mejor a largo plazo.

No nos damos cuenta, pero la mayor razón por la que gastamos demasiado y no ahorramos no es la falta de ingresos, sino la falta de organización.

 

La organización: la clave que marca la diferencia

Ahorrar no empieza con tener más dinero, sino con saber administrar lo que ya tienes. La organización financiera permite tomar control de los gastos, evitar compras innecesarias y dar dirección a cada peso que entra.

Las personas que logran ahorrar suelen:

  1. Registrar sus gastos.
  • Anotan o usan aplicaciones para saber exactamente en qué se va su dinero. Este simple hábito crea conciencia y evita el clásico “no sé en qué se me fue”.
  1. Planifican su presupuesto.
  • Separan sus ingresos en categorías: gastos fijos, diversión, imprevistos y ahorro. Tener un plan escrito evita improvisar y gastar por impulso.
  1. Anticipan sus pagos.
  • Pagan a tiempo servicios o deudas para evitar recargos y estrés financiero.
  1. Establecen prioridades.
  • Saben diferenciar entre lo urgente, lo necesario y lo deseable. De esta forma, su dinero trabaja a su favor.
  1. Son estratégicos en su consumo.
  • Comparan precios, aprovechan descuentos y priorizan experiencias o productos que realmente aportan valor
  1. Valoran su bienestar financiero
  • Entienden que tener control sobre su dinero les da libertad, tranquilidad y oportunidades para el futuro.

 

Una buena organización no solo mejora las finanzas, sino que también reduce la ansiedad y da una sensación de control. Al tener claridad sobre sus ingresos y gastos, el ahorro deja de parecer una carga y se convierte en un hábito natural.

 

El ahorro empieza con pequeños pasos

Ahorrar no se logra de un día para otro, sino con constancia y pequeñas acciones diarias:

  • Controlar los gastos impulsivos.
  • Poner metas realistas y alcanzables.
  • Cambiar la mentalidad de “gastar primero y ahorrar lo que sobra” por “ahorrar primero y gastar lo necesario”.

Muchas personas que antes creían que no podían ahorrar descubrieron que bastaba con pequeños ajustes: cocinar más en casa, reducir compras impulsivas o fijar metas semanales.

 

El cambio de mentalidad: del “no puedo” al “sí puedo”

El mayor obstáculo no es el dinero, sino la mentalidad. Ahorrar deja de ser imposible cuando lo ves como una herramienta para lograr tus objetivos personales y no como un castigo.

Por ejemplo, cada vez que decido no comprar ese café o cocinar en casa en lugar de salir a comer, cambio el pensamiento de “lo hago porque debo ahorrar” por “lo hago porque quiero alcanzar mi meta: ese viaje de verano o mi nueva computadora”.

De esa manera, los “sacrificios” se vuelven más ligeros y con propósito.

En conclusión, ahorrar no es cuestión de suerte, sino de mentalidad y organización. Cuando entiendes que cada decisión financiera te acerca o te aleja de tus metas, el ahorro deja de ser una carga y se convierte en una herramienta poderosa para construir el futuro que deseas

¡Lo puedo lograr! Micro ahorro, pre-ahorro y ahorro de ingresos extras

¡Lo puedo lograr! Micro ahorro, pre-ahorro y ahorro de ingresos extras

Ahorro General

Autora: Lourdes Hernández

El Pre-Ahorro es una de las reglas de la libertad financiera. En cuanto llegan tus ingresos, salarios y ventas, guarda el 10%. Como si fuera tu primer gasto o tu primer pago.

Sin embargo una de las Leyes de Parkinson, en la parte referente al ahorro, nos bloquea. Dice: “Los gastos aumentan hasta cubrir todos los ingresos”.

Decimos “si ganara $500 más, todos mis problemas estarían solucionados” y llega el aumento de sueldo y vuelves a gastar todo y a seguir en problemas.

El 70% de los ecuatorianos gasta todo su sueldo la primera semana de recibido. Nos apuramos en gastar en vez de disfrutar revisando periódicamente los ahorros y ver que siguen creciendo.

¡Es una ley que hay que romper!

¿Cómo lograrlo?

Ganarle a la mente y a los hábitos y poner como primer gasto, tu ahorro. Así la mente cree que ya no hay dinero y para de gastar… mientras el dinero está bien guardado.

Empiezas así:

  • Mi pago: $$, depositado en la cuenta especial de ahorros. Pagado.
  • Arriendo o condominio: $$. Pagado.
  • Tarjeta de crédito: $$$. Pagado.
  • Plan de celular: $$. Pagado
  • Y todos los demás rubros.

Microahorro: es un hábito sencillo de recorte. Una semana no gastar en el capuchino; no pagar la peluquería; caminar en vez de tomar taxi.  Ese micro ahorro se guarda en una alcancía. Apagar las luces que no se necesitan, comprar lo justo de alimentos para evitar el desperdicio, cerrar la llave de agua, etc.

Ahorro: es guardar todo o parte de los ingresos extras como sobresueldos, bonos, subidas de sueldo. Según el mismo estudio, el 38% de ecuatorianos ahorra y si llega un ingreso extra, solo el 36% lo ahorra y el 32% lo usa para pagar deudas.

 

Seamos parte de ese 36% y guardemos el extra que nos llega.

Resumen de libertad financiera:

  1. No es tener una vida de lujos, sino tiempo libre para hacer lo que te apetezca
  2. Vivir por debajo de tus posibilidades
  3. Pre-ahorrar el 10% de tus ingresos
  4. Ahorrar tus subidas de sueldo o bonos
  5. No endeudarse (excepto para cosas grandes con retorno)
  6. Generar ingresos recurrentes

 

Fuente: Mago More, @invertiresvivir,

Estrategia para ahorrar para diciembre

Estrategia para ahorrar para diciembre

Ahorro General

Autora: Lourdes Hernández

¿Cuál es la mejor estrategia para ahorrar desde hoy para cubrir gastos de diciembre, como cenas, regalos y viajes?

Es ponerse una meta: llegaré al 2 enero con un remanente de los ahorros que decidí construir desde hoy. Es un compromiso conmigo mismo.

Y ese ahorro, ¿en qué lo voy a gastar? En una lista sumamente detallada para no perderme. Y desde hoy reviso costos de regalos, costos de compras y reservas de viaje. Puedo ir separando desde ya un juguete especial antes de que se agote; si tengo tarjeta pongo la compra a tres meses porque en diciembre o enero podré pagar ese crédito con mis ahorros.

Normalmente, los expertos recomiendan ahorrar cada mes el 10% de los ingresos. El compromiso de hoy implica guardar un 2% extra, o más, con el enfoque en mi meta.

¿Dónde guardo ese dinero? ¿Cuentas de ahorro, fondos, sobres físicos, aplicaciones?

El método que vale es el que no lo tienes cerca ni es fácil sacar. Una cuenta de ahorros adicional a la del consumo diario es lo mejor.

Hay de “ahorro programado”, “rentahorro”, etc.

Y si me falta el dinero, ¿es recomendable endeudarme?

No es recomendable endeudarse en diciembre. Se puede utilizar el sobresueldo (décimo tercero) o el bono, pero lo mejor es el ahorro que se guardó desde hoy. Para regalos, cena de Nochebuena, cena de Fin de Año, para el viaje de fin de año (revisa el Reto de Ahorro para un Fin de Año Increíble)

Si eres emprendedor ten listos los productos para vender en noviembre y diciembre. Anticiparse. No sacar a vender a última hora.

¿Qué errores financieros cometemos en esta época?

El primer error, no ser persistentes en este compromiso de “Llegar al 2 enero con un remanente de los ahorros que decidí construir desde hoy”, con la planificación y el presupuesto.

Segundo error: llegar a Navidad sin regalos y comprar cualquier cosa innecesaria, no adecuada a su destinatario, acabar gastando demasiado, u olvidar regalos.

Tercero: Confundir la fiesta de Navidad -que es para compartir con familia y amigos- con una fiesta de gasto excesivo.

Cuarto: Quedarse sin salir en vacaciones o mucho peor: ir sin reservaciones y pasar muy malos momentos.

La consecuencia de estos errores es sobreendeudarse.

Austeridad: un nuevo estilo de vida en tus finanzas personales

Austeridad: un nuevo estilo de vida en tus finanzas personales

Ahorro General

La austeridad como estilo de vida para las finanzas personales implica moderar el gasto, simplificar el consumo y priorizar las necesidades para ahorrar, pagar deudas y alcanzar metas financieras. Además, se trata de un enfoque que te permite gestionar tu dinero sin caer en los excesos.

Uno de los beneficios más notables que te aporta esta práctica es la reducción del estrés y ansiedad financiera. Al reducir los compromisos económicos, tener menos deudas y mayor control sobre los gastos, generas una sensación de estabilidad. Creas un sistema financiero propio predecible y poco susceptible a imprevistos, algo que disminuye la ansiedad y que te permite decidir sin una presión constante.

¿Cómo administrar tus finanzas con austeridad?

  1. Prioriza los gastos importantes. Para conseguirlo, identifica cuáles son tus necesidades esenciales, como son vivienda, alimentación, transporte, salud y educación. Esto te permite diseñar un presupuesto claro para cada categoría y asegurarte de que lo básico esté cubierto sin descontrolar el gasto o generar ansiedad.
  1. Elimina o reduce lo superfluo, sin privarte de lo que te gusta. Debes apostar por ser selectivo y consciente. Pregúntate si cada gasto aporta valor duradero o responde a un mero impulso. Piensa en esas suscripciones que no usas, las compras emocionales que realizas o los aparatos que reemplazas sin necesidad. Todos estos son buenos ejemplos de áreas donde puedes efectuar ajustes sin perder calidad de vida.
  1. Construye un sistema financiero claro y ordenado. Esto implica que diseñes una estructura sencilla, con cuentas diferenciadas, automatización de los pagos importantes y definición de metas financieras mensuales o anuales.
  1. Aliena tus decisiones económicas con tus valores personales. ¿Estás gastando en cosas que realmente te importan? ¿Tus inversiones reflejan tu visión de futuro? Gestionar el dinero de forma minimalista es usarlo con intención para evitar la dispersión y favorecer una economía personal coherente y sostenible.

 

Al adoptar la austeridad financiera disminuyes el estrés y la ansiedad relacionadas con el dinero. Lo consigues al tener una visión clara de tus ingresos, gastos y objetivos, lo que reduce la incertidumbre y el descontrol económico. Como prescindes de compromisos financieros innecesarios, liberas una parte significativa del presupuesto mensual, algo que aumenta la sensación de seguridad y estabilidad financiera.

 

Historial crediticio para jóvenes: cómo construirlo

Historial crediticio para jóvenes: cómo construirlo

Crédito General

Cuando pensamos en historial crediticio, solemos imaginar adultos con hipotecas, tarjetas de crédito o préstamos grandes. Pero lo cierto es que ese historial puede empezar a construirse mucho antes de lo que te imaginas.

Tu comportamiento financiero desde los primeros pagos, servicios contratados o solicitudes de productos a crédito comienza a dejar una huella en tu historial. Y esa huella puede abrirte o cerrarte puertas.

Te explicamos cómo puedes comenzar a construir, y cuidar, tu historial crediticio, incluso si apenas estás entrando al mundo financiero.

¿Qué es el historial crediticio?

El historial crediticio es el registro del comportamiento que has tenido con tus obligaciones financieras: si cumples con los pagos, si te atrasas, si has incumplido algún acuerdo o si simplemente no has interactuado con productos financieros aún.

Cada vez que contratas un plan de celular, compras algo a cuotas o solicitas un crédito —por más pequeño que sea— estás dejando un rastro en tu historial. Este registro lo compilan los burós de crédito y es consultado por bancos, cooperativas, y otras instituciones cuando solicitas un crédito.

Conoce su importancia…

Muchos jóvenes creen que el historial solo importa cuando piensan en créditos grandes. Pero lo cierto es que tener (o no tener) historial afecta tu posibilidad de acceder a un crédito. Un historial positivo puede significar acceso rápido, mejores tasas, menos requisitos. Uno negativo o inexistente puede traducirse en rechazos o condiciones desfavorables.

¿Cómo comenzar a construir tu historial crediticio?

Puedes comenzar con productos sencillos, siempre y cuando cumplas con los pagos a tiempo. Un crédito educativo responsable, un servicio financiado que se paga puntualmente o un crédito diferido de algún producto que has comprado.

Presta mucha atención cómo manejas tu crédito…

Retrasarte en los pagos, ignorar notificaciones de cobro, dejar una deuda sin cancelar o solicitar múltiples créditos en poco tiempo son comportamientos que generan alerta en los burós de crédito. Aunque parezcan pequeños descuidos, tienen consecuencias que pueden durar años.

Recuerda..

Tu historial es como una reputación financiera (y ya la estás construyendo). Aunque no lo veas, tus decisiones financieras ya están hablando por ti. Y así como joven cuidas tu reputación en redes o en el trabajo, deberías también cuidar tu reputación ante el sistema financiero.

Caso de emprendimiento exitoso

Caso de emprendimiento exitoso

Emprendimiento General

Autora: Alejandra Andrade

De $700 a una Empresa Millonaria: El Caso de Carlos Andrés Yépez

Carlos Andrés Yépez, un joven quiteño de apenas 19 años, es hoy uno de los referentes del emprendimiento juvenil en Ecuador. Su historia es un ejemplo inspirador de cómo la pasión, la disciplina y el acceso a crédito pueden convertir una idea modesta en un negocio de alto impacto.

Carlos comenzó su emprendimiento a los 16 años con un capital inicial de $700 dólares, que había ahorrado durante sus estudios. Con ese dinero compró una impresora básica y empezó a ofrecer servicios de impresión de documentos, diseño de tarjetas personales y publicidad impresa sencilla desde su habitación.

Su clientela inicial estaba compuesta por estudiantes, pequeños negocios y vecinos del barrio. Todo lo gestionaba personalmente, utilizando canales como WhatsApp y redes sociales para promocionar sus servicios.

Al ver el potencial de su negocio, Carlos decidió solicitar un crédito en una entidad financiera local, lo que le permitió adquirir maquinaria profesional, contratar personal y abrir una oficina. Este paso fue clave para escalar su emprendimiento.

Gracias a programas como Crédito Joven Emprende de BanEcuador, que ofrece hasta $10.000 con tasas accesibles y requisitos adaptados a jóvenes emprendedores, Carlos pudo formalizar su empresa y expandir sus operaciones.

Hoy, la empresa de Carlos ofrece una amplia gama de servicios que van mucho más allá de la impresión básica:

  • Logotipos corporativos
  • Identidad visual completa
  • Piezas publicitarias para redes sociales
  • Diseño editorial (revistas, catálogos)
  • Tarjetas de presentación premium
  • Flyers, afiches y gigantografías
  • Material POP (pendones, vinilos, stickers)
  • Impresión láser y offset
  • Diseño de páginas web
  • Branding digital
  • Gestión de redes sociales
  • Talleres para jóvenes emprendedores
  • Asesoría en diseño gráfico y marketing visual

Carlos Andrés Yépez ha logrado posicionar su empresa como una de las más prometedoras en el sector del diseño gráfico e impresión en Ecuador. Con más de 500 clientes en todo el país, su emprendimiento genera ingresos anuales superiores al millón de dólares y ha contribuido a la creación de empleo directo e indirecto. Además, su participación en eventos de formación y mentoría juvenil lo ha convertido en un modelo a seguir para otros jóvenes emprendedores, demostrando que, con visión, esfuerzo y acceso a crédito, es posible alcanzar el éxito empresarial desde temprana edad.

Referencias

Jóvenes emprendedores ecuatorianos | Emprender Fácil

Diseño Gráfico Quito – Imprenta Quito La Mejor. Diseño Gráfico, Publicidad, Impresión y más servicios promocionales en Quito, Ecuador

Agencia Diseño gráfico y Servicios Impresión PÁGINAS WEB ECUADOR

Prendho incuba 31 nuevos emprendimientos en Ecuador | Ekosnegocios

Pasos para crear un emprendimiento exitoso

Pasos para crear un emprendimiento exitoso

Emprendimiento General

Autora: Ana María Velasco

Muchos tenemos la cabeza llena de ideas de negocio. Nos emociona imaginar los diferentes emprendimientos que podríamos iniciar. El sueño de tener nuestra propia cafetería o de compartir nuestro arte con el mundo sigue más presente que nunca.

Sin embargo, la mayoría de las veces estas ideas se quedan en eso: sueños, planes y anhelos. Son pocas las ocasiones en que nos atrevemos a dar el salto y emprender de verdad en algo que nos apasiona.

¿Por qué? Muchas veces es por miedo. Pensamos que es demasiado complicado, que nos va a consumir todo el tiempo o que simplemente es un sueño imposible.

Pero, ¿qué pasaría si te dijera que emprender no es tan difícil como parece? ¿Que el negocio de tus sueños está más cerca de lo que imaginas y que lo único que te detiene es el miedo?

Por eso quiero compartirte unos pasos simples, pero muy efectivos, para que te animes a emprender. Para que pongas en marcha esos sueños y descubras que sacar tu negocio adelante es más fácil de lo que piensas.

Paso 1: Identifica un problema real y valídalo

Lo primero es encontrar un problema que quieras resolver y asegurarte de que realmente existe un mercado para tu idea.

Por ejemplo, si tu pasión es hacer pizza y sueñas con abrir una pizzería, piensa: ¿qué necesidad vas a cubrir? Tal vez en tu ciudad no hay suficientes pizzerías, o quizás solo existen cadenas rápidas y tú quieres ofrecer una opción distinta, con masa fina y recetas especiales.

La clave está en no enamorarse solo de la idea, sino en validarla. Pregúntate:

  • ¿Hay gente interesada en lo que ofreces?
  • ¿Tienes acceso a los recursos e ingredientes que necesitas?
  • ¿Es viable montar tu negocio en la ciudad donde vives?

Soñar es importante, pero asegurarse de que hay un problema real que resolver es lo que da fuerza al emprendimiento.

Paso 2: Haz un plan financiero sencillo

Otro paso fundamental es tener claros los números. Pregúntate:

  • ¿Es viable este negocio?
  • ¿Cuánto espero ingresar cada mes?
  • ¿Cuáles serán mis gastos fijos?
  • ¿Cuál podría ser mi margen de ganancia?

Esto es clave para saber si tu idea será rentable.

Por ejemplo, si no puedes cobrar más de 4 $ por tus pizzas y solo los ingredientes te cuestan 2.50 $, necesitas analizar si realmente podrás generar utilidades.

Un plan financiero no tiene que ser complicado, pero sí honesto y realista.

Paso 3: Empieza pequeño, válida y luego escala

Emprender no significa renunciar a todo para abrir un local enorme con maquinaria costosa y endeudarte desde el día uno.

Al contrario, lo mejor es empezar pequeño y probar tu idea. Puedes ofrecer tu producto o servicio primero a tu familia y amigos. Con el tiempo, irás ajustando recetas, metodologías, logística de entregas y construyendo una clientela fiel.

Una vez tengas esa base sólida, podrás crecer poco a poco, reinvirtiendo tus ingresos o incluso accediendo a un crédito con mayor seguridad.

Paso 4: Aprovecha las herramientas para emprender

Hoy en día existen muchas instituciones que apoyan a los pequeños negocios. Puedes encontrar diferentes opciones de financiamiento: tarjetas empresariales, préstamos personales e incluso fintech diseñadas para emprendedores.

Estas herramientas son muy útiles, especialmente en las primeras etapas, cuando necesitas una inversión inicial más grande.

Paso 5: Busca comunidad

Emprender no tiene por qué ser un camino solitario. Busca mentores, incubadoras de proyectos o haz networking con personas de tu misma industria.

Ellos no solo te acompañarán en el proceso, sino que también te darán consejos valiosos basados en su propia experiencia.

 

Conclusión:

​​Emprender no es un salto al vacío, es un camino que se construye paso a paso. Con claridad, planificación y apoyo, tus sueños pueden convertirse en un negocio real y sostenible. Lo más importante es empezar: dar ese primer paso que separa la idea de la acción.

 

 

El emprendimiento como un segundo empleo

El emprendimiento como un segundo empleo

Emprendimiento General

Autora: Ana María Velasco

Emprender puede ser la solución a muchos de nuestros problemas financieros. Es una herramienta poderosa que no solo nos ayuda a pagar deudas o a generar un ingreso extra, sino que también nos permite crecer, aprender y descubrir nuevas habilidades.

El problema es que cuando pensamos en emprender, muchas veces nos imaginamos algo gigante y complicado: renunciar al trabajo, invertir todo nuestro dinero y sacrificar nuestra vida personal. Y claro, así cualquiera se asusta.

Pero, ¿y si lo vemos diferente? ¿Y si emprendemos de una forma más sencilla, como un complemento y no como un cambio radical? Emprender no significa dejarlo todo para abrir una tienda enorme o un negocio imposible. A veces, el emprendimiento ya está en nuestras manos y no lo hemos monetizado: esas lasañas deliciosas que haces, esa habilidad para dar clases de tu deporte favorito, o incluso vender cosas que ya no usas en internet.

Lo  increíble del emprendimiento es que no tiene reglas fijas. Se puede empezar en cualquier momento de la vida: mientras trabajas a tiempo completo, estudias o incluso cuando te haces cargo de toda tu familia.

Mucha gente cree que para emprender hay que renunciar al trabajo, y no. Tu empleo puede ser tu mejor aliado. No necesitas renunciar mañana a tu trabajo para emprender. De hecho, tu empleo actual puede ser tu socio silencioso: tu salario respalda tus créditos, paga tus primeros errores y te da estabilidad

¿Por qué emprender como segundo empleo?

  1. Porque te ayuda a diversificar tus ingresos y no depender solo de un sueldo.
  2. Porque tu salario te da tranquilidad mientras pruebas tu idea.
  3. Porque aprendes cosas nuevas que incluso te sirven en tu trabajo actual.
  4. Porque puedes avanzar a tu propio ritmo, sin la presión de que el negocio te sostenga desde el primer día.
  5. Porque un ingreso extra hoy puede convertirse en tu negocio principal mañana.

Tips para lanzarte sin dejar tu trabajo

  • Dedica un pedacito fijo de tu tiempo libre, por ejemplo el 20%, a tu proyecto.
  • Usa tu sueldo como aval para créditos o para cubrir tus primeros gastos.
  • Empieza en pequeño: con tus ahorros, con un préstamo pequeño o vendiendo solo a conocidos al inicio.
  • Apóyate en lo digital: redes sociales y plataformas online te facilitan vender sin gastar mucho.
  • Haz networking: busca personas que ya pasaron por el camino, te pueden ahorrar errores.
  • Lleva cuentas claras desde el inicio, aunque solo vendas un par de cosas.

Algunos ejemplos de emprendimientos que puedes tener como segundo empleo incluyen:

  1. Vender postres o comida bajo pedido.
  2. Dar clases de algo que domines (idiomas, deportes, música).
  3. Ofrecer servicios freelance: diseño, marketing, redacción, asesorías.
  4. Revender productos por internet.
  5. Crear contenido digital y monetizarlo después.
  6. Rentar cosas que ya tengas: equipos, espacios o herramientas.

Tu trabajo no es un enemigo, es tu respaldo. Emprender como segundo ingreso te da libertad para equivocarte barato, aprender rápido y crecer con más seguridad.

No se trata de un salto al vacío, sino de dar pasos firmes poco a poco. Tal vez hoy sea solo un ingreso extra, pero mañana tu emprendimiento puede ser la puerta a la libertad financiera que siempre has querido