Libertad financiera para cumplir sueños

Libertad financiera para cumplir sueños

General

Autora: Lourdes Hernández

En Google encontramos que la libertad financiera significa vivir sin tener que preocuparse por el dinero.

Es decir, tener los recursos económicos para cubrir los gastos y controlar las finanzas personales con jubilación, rentas, utilidades, ahorros.

En resumen: tener ingresos, fijos y variables, tener ahorros y cumplir los compromisos de crédito, forman el panorama ideal para la libertad financiera.

¿Nos sentimos libres realmente? ¿Qué es ser libre?

Si somos esclavos del dinero, si solo hablamos del dinero cuando hay un problema, no somos libres.

Libertad financiera no es dejar de trabajar. Es trabajar en lo que nos gusta.

Libertad financiera es dejar de culpar al destino, a la vida o a Dios, de nuestros problemas. Es ser responsables.

El apego extremo nos aleja de la libertad financiera. Cuido cada centavo de mi ahorro, sufro si pierdo diez dólares -aunque haya ganado cien mil. Es una sensación que nos quita tranquilidad.

Practicar la libertad es estar conscientes de que a veces hay dinero y otras no tanto, pero que tenemos control sobre éste.

Libertad financiera es tener tiempo para practicar la generosidad -que nos lleva al desapego. Es regalar cuando no haya motivo para regalar. Ahorrar para una meta secreta y gastar ese dinero con alguien que amamos. Es disfrutar con lo que tenemos sin caer en el derroche.

Sin ingresos no podemos vivir. ¡Así es!

Tener ingresos fijos y variables y superar las creencias y tabúes del dinero, nos lleva a vivir libremente. Las formas de tener ingresos o incrementarlos son: trabajo, herencia, lotería, negocio, inversión, donación, ventas, patrocinio, subsidio, caridad, rendimiento, comisiones, utilidades, regalo, recompensa, familia, bonos.

Con deudas sí se puede tener libertad financiera.

Es más, tener líneas de crédito abiertas para nuestros proyectos, es una gran manera de vivir libremente. Eso sí, es necesario mantenerse informado a través del buró de crédito sobre nuestra situación crediticia. Es tener conciencia de los pagos que se realizan cada mes. Es destinar el dinero del préstamo de forma productiva.

Planificar y gozar:

La alegría, la felicidad, la belleza son de todos los seres humanos sin distinción de clases, razas, edad. La libertad financiera incluye estos tres conceptos porque si no, no hay libertad.

¿Queremos pagar nuestras vacaciones sin tener que endeudarnos? Hagamos un plan con presupuesto y cronograma.

¿Queremos estudiar, emprender? Hagamos un plan con presupuesto y cronograma.

¿Queremos sentirnos completos y recibir más por nuestro dinero? Pongamos un presupuesto y cronograma para generosidad. Hacer cosas buenas por los demás nos devuelve mucho más que solo guardar y consumir para nosotros.

Regalar un refrigerio, sembrar un árbol, dar paso a alguien, visitar un enfermo, cuidar un niño, apoyar a una fundación, es positivo y contagioso.

Hay que comentarlo con otros, así puede que se les ocurra imitarnos y propagar aún más el bien.